Joaquín Sorolla, Después del baño |
-El domingo no hay partido de fútbol.
-Usted se sienta y no dice palabra.
-Mañana vamos a la playa.
-Todos los sábados vamos a bailar.
-La semana próxima tengo mucho trabajo.
-Te arreglas pronto y no dices nada.
-El año próximo vamos a Roma.
-Me levanto siempre a las siete de la mañana.
-España pierde sus últimas colonias en 1898.
-Yo siempre iba a casa de mis abuelos.
-Si pudiera, me iba de casa.
-Quería pedirle un favor...
-No matarás.
-Serían las cinco cuando llegó.
-Podría darme una monedita, por favor.
-Cuando llegué, hablaba por teléfono.
-Podías ayudarme, ¿no?
-¿Será tan amable de ayudarme a bajar las escaleras?
-¿Me dejarás en paz de una vez, pesado?
Actividad 2:
-El andar es conveniente.
-Querer es poder.
-Ya es hora de empezar.
-Este problema es fácil de resolver.
-Estoy lejos de aprobar.
-Lamento disentir.
-Realizó todo el trabajo sin protestar.
-Me alegro de estudiar.
-Me gusta nadar en la piscina.
-Eso es vivir bien.
-Deme papel de envolver regalos.
-Es difícil de resolver en cinco minutos.
-Espero conseguir un buen trabajo.
-Al llegar el invierno, no salgo de casa.
-No cenarás hoy por llegar tarde.
-Pasaron el rato charlando.
-No entréis en casa haciendo ruido.
-Marta, pensando que no la iban a escuchar, se fue.
-Encontramos al niño durmiendo en el suelo.
-Estando yo presente, no ocurrirá nada. (Construcción absoluta).
-Habiendo entrado el capitán, se pusieron todos firmes. (Construcción absoluta).
-Aún habiéndolo dicho tú, no lo creo. (Construcción absoluta).
-Proponiéndonoslo, el asunto quedará resuelto. (Construcción absoluta).
-Los periódicos publicados hoy traen la noticia.
-Terminada la función, se marcharon a su casa. (Construcción absoluta),
-La niña estaba dormida.
-Los caballos llegaron cansados.
-He conseguido un premio merecido.
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